miércoles, 10 de marzo de 2010

El Patrimonio Cultural Municipal

Por Juan José Mesa

El Patrimonio Cultural Municipal, es el conjunto de todos los bienes que hacen parte, y construyen el territorio municipal. Dichos bienes son expresión directa, extensa y plena de la cultura de un pueblo. Está directamente relacionado con los recursos ambientales, como con aquellos elementos y fenómenos que son producto de la interacción social: su producción material y simbólica.

El patrimonio cultural no es una carga. En la sociedad contemporánea mediante una gestión municipal moderna puede transformarse en fuente de riqueza y de desarrollo para el municipio que lo posee. Hoy tiene que ser valorado tanto en términos económicos como políticos, tomando en consideración las sinergias que se producen en este contexto, independientemente de los aspectos sociales o culturales que permiten integrar otras dimensiones de carácter intersectorial que afectan las comunidades de forma global, favoreciendo la cohesión y la integración social.

Es la Administración Municipal, la llamada a velar y a tener la responsabilidad de lograr el refuerzo de la cultura local. A permitir la canalización de recursos culturales, económicos y humanos por parte de organismos e instituciones de carácter público. Si desde los ayuntamientos se pone en marcha un programa de gestión cultural moderna, que a la vez sea un instrumento de gestión operativo para aumentar esfuerzos, potenciar recursos dentro de un marco de desarrollo global de la ciudad, estarían sentadas las bases para la creación de una legislación de en materia de patrocinio y mecenazgo. Es lo que las organizaciones del sector privado u organismos internacionales necesitan, para invertir recursos en ese sector. Reglas claras.

A la fecha, en plena recta final de la contienda electoral para el nivel Congresional y Municipal, el tema del Patrimonio Cultural Municipal está ausente en el discurso de los aspirantes a las alcaldías más importantes del país y en aquellos que aspiran reelegirse.

Para una idea, muestra un botón..., los aspirantes a alcaldes tan solo tienen que comenzar por determinar la estructura y el perfil de los activos patrimoniales de sus respectivos municipios, tomando en consideración que los bienes que integran el patrimonio de un municipio lo son, tanto en cuanto están vinculados a su historia y ayudan a explicarla.

Una reflexión sobre el Patrimonio Cultural Municipal

Por Juan José Mesa

Nuestro país está nuevamente metido en lo que debería ser la alternancia en el ejercicio del Poder político, de cara a las Elecciones Congresionales y Municipales el 16 de mayo próximo.
En todos los rincones de nuestros municipios las tradicionales fuerzas políticas presentan candidaturas como opciones de cambio. Discursos van y vienen; pero ninguno de los munícipes que aspiran a dirigir las alcaldías saca a relucir cuáles serán las políticas culturales que aplicarán en caso de ganar el favor del Soberano pueblo.

En cuanto al Patrimonio Cultural Municipal es notorio: falta de coordinación en las inversiones, inexistencia de departamentos específicos para la gestión del Patrimonio Histórico e insuficiencia de medios humanos y técnicos.
La situación general que presenta la gestión del patrimonio cultural en casi la totalidad de las administraciones locales en nuestro país, es deficitaria y, deficiente, fruto de una larga tradición de abandono por parte los ayuntamientos, unida a una cultura funcionarial excesivamente burocrática que durante mucho tiempo ha considerado el patrimonio cultural como una carga que se debe soportar con resignación.

Esta situación nos obliga llamar a reflexionar y traer el tema al debate electoral, y le solicitamos, a los candidatos a las alcaldías de las principales ciudades del país, que incluyan en sus programas políticos directrices específicas sobre lo que harán en Cultura y hacerla de público conocimiento, con la finalidad de contribuir a que el Patrimonio Cultural Municipal, en sus diversas manifestaciones, sea de dotado esfuerzos estratégicos excepcionales, para su aprovechamiento y el enriquecimiento que reclama. Así como emprender desde la administración municipal la búsqueda de las herramientas encaminadas a potenciar el manejo patrimonial, lo cual constituye una extraordinaria fuente de riqueza material y de desarrollo para nuestros municipios.

La cultura, y el arte en particular, no son solo activos de largo plazo y la base de cualquier desarrollo de una Nación, sino que también la cultura y el arte son renglones de desarrollo económico y fuentes de ingresos importantes para el Estado.
Creemos que existe la esperanza de un mejor mañana y que otra República Dominicana es posible. Esperemos que el Todopoderoso nos ilumine el próximo 16 de mayo.